¿Humanus Asinus Maximun? (1)
¿PUEDE EL SER HUMANO SER ASNO TRÁGICO?
Las personas vivimos para distraernos y no para pensar. “Vade retro” pensamiento. Pensando se murió un burro es una “verdad” instituida y esto va de burros.
Distracción versus pensamiento. Dos circunstancias humanas que podrían convergir y que normalmente son opuestas.
Distracción: entretenimiento, diversión, pasatiempo, recreo, solaz, devaneo, omisión, olvido, inadvertencia, lapsus, desatención. Pensamiento: razonar, discurrir, cavilar, considerar, reflexionar meditar, filosofar, deducir, imaginar, proyectar, idear, planear, proponer. Allá por el año 1887 Friedrich Nietzsche, en uno de sus famosos escritos («El ocaso de los ídolos»- t.11), preguntó: «¿Puede resultar trágico un asno? ¿Perecer bajo una carga que no puede llevar ni quitar de encima?…Tal es el caso del filósofo»
Mi respuesta: ¡Creo que sí! y pregunto:
¿PUEDE EL SER HUMANO SER ASNO TRÁGICO? La respuesta es también: ¡Sí!
¡EL HUMANO PUEDE SER UN BURRO TRÁGICO Y LO ES!, con el agravante de que sucumbe al peso de una carga que no puede portar, pero que se la ha puesto él y que si quiere puede librarse de ella.
El humano puede ser asno y lo es. La diferencia está en que al asno “Equus africanus asinus”, la carga, se la ponen elementos externos a él y sujetan bien para que no la tire. Se resiste, cocea y cuando es muy pesada, aunque pueda con ella se niega a caminar, solo lo hace mediante castigo: Dice la canción: “No te acuerdas burro, Camino de Pereña, Tú tirabas coces Y yo te daba leña”. Ya el humano (en buena parte) la carga se la pone él y la transporta feliz por lo cual no quiere librarse de una carga que no percibe como tal y aquí es donde comienza la tragedia, o para otros “La fiesta del asno (en latín “Festum Asinorum” o “asinaria festa”), en Francia “Fête de l’âne” y en muchos países incluso lo llaman “evento cultural” = “Asnos en fiesta”. Esta fiesta la hay de muchas variantes: La religiosa, la social, la política, la sindical, la “cultural”… y es donde más se practica aquello de “Asinus asinum fricat.” («El asno frota al asno» = alabanzas mutuas entre ignorantes). El mundo es de una gran variedad, incluida la de los humanos que lo habitamos, sin embargo en lo esencial, en eso que nos caracteriza y que nos han dicho que somos: “homo sapiens”, (parida de una hipótesis) son pocas las diferencias de comportamiento entre razas y continentes. ¿Sapiens como característica determinante? ¿Quién nos calificó como sapiens? Seguro que fue un “homo”. “Vanitas vanitatum et omnia vanitas”. Y seguro estoy que no consideró otras alternativas o posibilidades como: homo ignorare, brute, odium, asinus, besti características de homo pero con nada de sapiens.
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Algunas personas, simplemente conocidas como “los locos de atar”, creemos en un ciclo llamado domesticación (mutua imposición-aceptación) y que se inicia con la educación y buenas maneras, concluye en la especialización, siendo esta a su vez, la antesala de una nueva forma de esclavitud y vuelta a la barbarie en que se cierra el ciclo y se abre otro en una fase superior, según el desarrollo marxista en espiral. En algunas noches de insomnio pienso en los burros y en los perros, o asnos y canes que es más fino. El mutuo esfuerzo por entendernos y soportarnos de acuerdo con aquello que más nos una, identifique y aproxime. Una gran duda me asalta. ¿La convivencia hace que los diferentes animales con cerebro se adapten unos a otros y se transmitan experiencias de como soportarse para subsistir? Si no consiguen adaptarse, comunicarse, amaestrarse, domesticarse o educarse en comunidad, una de las especies desaparece. Quiénes lo dicen, son científicos que se basan en estudios a dinosaurios (mejor dicho a los supuestos restos de) y otras especies menos fuertes que el “sapiens”, a quien no consiguieron dominar. Por su vez ellos no se dejaron,… y desaparecieron. ¿Con quién nos identificamos y tenemos más en común? ¿Con el burro o con el perro? ¿Humano perro burro? ¿“Sapiens canis asinus”? Veamos: Está escrito por “gentes de la ciencia”, que “el canis lupus” se inició su domesticación hace unos 18.000 años a.C. desde entonces se evoluciona en conjunto. Otras personas (homos) no menos científicas hablan de 30.000 años a.C. Es una domesticación/dominación completa, el “canis domesticum” acepta todo y no protesta y en esta aceptación/sumisión pacífica está el conseguir su buena vida perra. ¿Hacemos lo mismo? ¿“homo” se somete a “homo”? Como todo en la vida hay excepciones, veremos como acaba la “Ley del bienestar animal” en el asunto de los perros de caza. El primer asalto lo gana el animal “canis domesticum” Ya el perro libre, el no “domesticum” (de calle) las pasa perras o putas. Con el “equus asinus” aseguran que nuestra convivencia, la domesticación-educación fue iniciada hace unos 5.000 años a.C. o sea bastante más tarde. La relación es diferente. Si algo le molesta o no le gusta, el burro no avanza, no mueve el rabo en señal de agradecimiento y si puede te cocea. Aseguran que el “asinus domesticum”, como el dinosaurio y otras especies, está en fase de desaparición por inadaptación rebelde, además actualmente no tiene utilidad, es muy grande, come mucho y no mueve el rabo en señal de agradecimiento. “El burro nunca tropieza dos veces en la misma piedra”. Cuando la carga es mucha no camina, o bien se roza contra las paredes para librarse de ella, si le castigas, ¡ojo! intenta morderte o te cocea. No es extraño ver a un burro brutalmente apaleado y no camina sin quitarle parte de la carga, que puede llevar, pero que él considera excesiva y se niega. Cae, pero no camina. En llegando a esta pasión/ un volcán, un Etna hecho, / quisiera arrancar del pecho/ pedazos del corazón. (Calderón de la Barca- La vida es sueño). En mi caso el volcán está en la cabeza y quisiera acercarme un poco a la razón. Tantos años de convivencia. No hay otro parangón ¿Quizás las gallinas y gallos? 6.000 años a.C. dicen, y nos dan el huevo y… Ahora veamos. Dícese: “Perro ladrador poco mordedor”. Consecuentemente el buen perro ladra poco y muerde mucho, y se defiende incluso ante lobos y osos que son más fuertes. Puede abandonar la pelea si esta en inferioridad, pero no huye. En contrapartida, aunque el dueño (el patrón) le castigue injustamente, aguanta (excepto un par de razas), le lame la mano y obedece. ¿Es esta obediencia “ciega” lo que cierra esos fuertes lazos de “amistad”? ¿Temor hacia el homo por la parte canina? ¿Está esta característica canina ya asimilada por el “homo sapiens” hacia otros hombres? ¡Obediencia! ¿Ladra (protesta) algo y no muerde? Por otro lado, aguanta casi todo, también lame la mano que le castiga y hasta menea el “rabo” agradecido. Elige para que le gobiernen
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y manden (el can y el asno no eligen) y hasta hace fiesta y reelige a quien le castiga Al final de la fiesta se va para casa y a veces por el camino ladra, reclama, pero sin fuerza. El “homo” tropieza diez veces o más en la misma piedra. Si fuere necesario, explica al amo como tiene que colocar la carga para llevar más. En este mundo escénico la farsa del “homo sapiens asinus canis” que se cree libre ¿qué es?: ¿Comedia, drama, tragedia? Le dicen que es libre y se lo creé. Reflexión y conocimiento ¿para qué?, si es pérdida de tiempo, si todo es igual. La Libertad es una estatua que está en EE.UU. y desde allí la luz de su antorcha ilumina al mundo, que además es su nombre oficial: “La Libertad iluminando el mundo”. * Todos felices. ¿24:00 o 00:00 horas? me pondré una venda con hielo en la cabeza e intentaré dormir. Buenas noches.
La más peligrosa corrupción es la de la mente, afecta a la razón.
¿Somos los españoles asnos trágicos?
Al día siguiente: «Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí». (Augusto Monterroso).
Elige bien, mirando a quién.
Juan Blanco Noriega
Diciembre 2022
*Fue un regalo de Francia a EE.UU. Buscaron un cuento disculpa: “cien años de la Independencia” ¿De quién,… y de quién? ¿Ingleses y otros conquistadores de los Sioux, Dakotas, Cheyenes…? Horrendo mamotreto de 225 toneladas y 93 metros de altura. A eso se reduce: “La Libertad iluminando el mundo” y todos felices